En los días siguientes al trágico terremoto que ocurrió en Pedernales en Abril de este año, afectando principalmente a poblados de Manabí y Esmeraldas, las empresas asociadas en APIVE decidieron aportar coordinadamente en la gestión del desastre y la posterior reconstrucción de las zonas afectadas.

El presente reporte corresponde a una de las actividades realizadas por APIVE, concluidas exitosamente el día 12 de Agosto con la entrega de 17 viviendas de tipo albergue semi-permanente, en la zona de Leonidas Plaza, en Bahía de Caráquez, Cantón Sucre de la Provincia de Manabí.  Este proyecto pudo concretarse gracias al liderazgo de la Curia del Cantón Sucre, en la persona del Padre Bruno dos Santos.  Otras empresas como DUFER, INPROEL y HORMIPISOS y ECUAVISA brindaron importantes donaciones en especie y esfuerzo humano.  Por parte de APIVE, el equipo técnico fue liderado por el Arquitecto Juan Pablo Patiño, en calidad de asesor de APIVE.  Más información detallada está disponible en el siguiente ARCHIVO.

Asociados que participaron en la donación

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Otras empresas donantes

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Las familias que recibieron viviendas en este proyecto emergente, bajo un concepto de albergue con potencial para convertirse en viviendas definitivas de crecimiento progresivo, habitaban en la zona de La Cruz, en la parte alta de Bahía de Caraquez.  La noche del terremoto, varias decenas de casas de La Cruz desaparecieron por completo, pues el terreno arcilloso de la montaña se desmoronó.

Como lo cuentan los moradores que fueron contactados por la Curia para identificar las familias beneficiarias de este proyecto, fue un milagro el que los había congregado en una zona exterior, a todos los habitantes de la zona, incluidos los niños, con motivo de una fiesta infantil, cuando ocurrió el terremoto.  Esta definición del destino hizo que, aunque perdieran sus viviendas y todas sus pertenencias, la tragedia se llevara solamente a una vecina.

Las casas construidas en este proyecto fueron contratadas con Hogar de Cristo y se instalaron sobre solares a los que se les proveyó de todos los servicios básicos necesarios, mejorando incluso la calidad de vida de los moradores respecto a las dotaciones de infraestructura propias de sus antiguas casas.

Ya para la primera quincena de mayo había sido levantada la información topográfica de un lote de propiedad de la Curia, que la Arquidiócesis de Portoviejo decidió poner inmediatamente a disposición del proyecto.  En el lote luego de los respectivos estudios, se instaló alcantarillado sanitario conectado a la red maestra, instalaciones de agua potable y construcción de cisterna central, se hincaron postes y se garantizó iluminación pública, además de dotarse a los moradores de una vía de circulación interna y de un área segura de encuentro social.

En total 82 personas, entre grandes y pequeños, habitan ahora en este proyecto de albergue semi permanente.  El presupuesto total de ejecución de la dotación de infraestructura y construcción de las casas, todas las donaciones gestionadas incluidas, superó los 100.000 mil dólares.  El proyecto fue inaugurado por el Obispo de Portoviejo, Monseñor Lorenzo Voltolini, en representación de la Arquidiócesis de la capital manabita.

Este proyecto marca la conclusión del ciclo de actividades inmediatas que las empresas de APIVE decidieron emprender en las zonas más perjudicadas por el terremoto.  En paralelo a la ejecución de este proyecto emergente y paliativo, varias iniciativas continúan ejecutándose bajo una óptica de asistencia técnica de mediano y largo plazo a otros municipios y fuerzas vivas de la zona, incluidas las ciudades de Portoviejo y Manta.